Lima, feb. 16 (ANDINA).- Mil 300 vicuñas fueron presa de cazadores furtivos en el 2004, el doble de lo registrado el 2003, advirtió hoy el Consejo Nacional de Camélidos Sudamericanos (Conacs).
Lima, feb. 16 (ANDINA).- Mil 300 vicuñas fueron presa de cazadores furtivos en el 2004, el doble de lo registrado el 2003, advirtió hoy el Consejo Nacional de Camélidos Sudamericanos (Conacs).
Su presidente, Wilder Trejo, explicó que este alarmante incremento obedece, principalmente, a que en el país todavía no se ha tipificado una sanción ejemplar para esta actividad ilegal.
“En el 2003, unas 630 vicuñas fueron víctimas de cazadores furtivos que comercializan la fibra en el mercado negro. El hecho de haberse duplicado en el 2004 genera mucha preocupación”, declaró a la agencia Andina.
Por ello, indicó, se ha iniciado una campaña, en coordinación con el ministerio de Agricultura, para combatir esta actividad y brindar mayor seguridad a las comunidades donde se cría la vicuña.
“Habrá mayor vigilancia para impedir que la fibra salga por la frontera con Bolivia, preferida por los traficantes, y se formarán organizaciones multicomunales que contratarán a guardaparques”, refirió.
Según Conacs, Ayacucho registra el 31.51 por ciento de casos de caza furtiva; Lima, 21.89 por ciento; Apurímac, 13.78 por ciento; Huancavelica, 10.49 por ciento; Puno, 7.48 por ciento, y otras regiones registran menos del cinco por ciento.
Las comunidades propietarias de vicuñas perdieron en el 2004 más de 140 mil dólares por la caza furtiva, tomando en cuenta que por cada ejemplar se obtienen 200 gramos de fibra y ésta se cotiza en 550 dólares.
Actualmente, la población de este tipo de camélidos en el Perú se aproxima a los 161 mil ejemplares, y se proyecta un crecimiento del ocho por ciento para el 2005.
(FIN) VVS/RES
Publicado: 16/2/2005